EL ORIGEN DE LA LEYENDA
Existen numerosas teorías sobre el origen del Tarot, pero parece ser que la más acertada podría ser que proviene del Egipto antiguo, y sería una transformación o adecuación del Libro de Toht, o libro del conocimiento, en el que el Dios escribe los actos de los hombres. Así a través de las diferentes tablillas se describiría el transcurso por la vida y la transformación hacia la realización del ser humano, y todas las alegrías o sufrimientos por los que tendría que pasar en su trayectoria de vida según esta se ajuste o no a las Leyes Universales y al propósito de su alma. Es probable que en un principio no fuese creado como medio adivinatorio, pero existe una leyenda con tintes bastante reales que cuenta que en la época faraónica tenian una caja con planchas metálicas muy finas las cuales cuando se colocaban en determinado orden podían ser usadas para interpretar y leer el futuro del mundo y del universo. Esta caja estaba guardada en una biblioteca junto con miles de manuscritos debajo de la gran esfinge. Actualmente está prohibido su excavación, pero los sónares y otros equipos han demostrado que sí existen esas salas y cámaras secretas que se conectan entre sí.
Se han encontrado restos en China del año 1100 aproximadamente, de una serie de cartas de marfil creadas para predecir el futuro, y también se conocen de esa época restos de naipes adivinatorios en la India.
Se cree que fue introducido en Europa en la baja edad media por los gitanos trashumantes que lo llevaron hasta Italia, de donde datan los primeros indicios europeos, el conocido como “Tarot de Marsella”, que es una adecuación a la cultura occidental del Tarot inicial.
En el siglo XIV, un estudioso del tema llegó a la conclusión de que el Tarot tal y como lo conocemos hoy en día, es una creación fechada en la Europa de la edad Media, en la que se usan diferentes simbologías entre las que encontramos los nabis, la cábala, la numerología y la astrología. Durante siglos fue un juego de distracción que usaba la nobleza.
De todo esto deducimos, que es muy posible que desde sus antigüos orígenes, en el antiguo Egipto (incluso antes de la época faraónica), y a través de los siglos y de diferentes culturas, se haya ido amoldando su simbología para adecuarse a ellas.
Existen, debido a esto, numerosos tipos de barajas de Tarot, aunque casi todas se componen de 78 láminas, 22 arcanos mayores y 56 arcanos menores. En todas estas ilustraciones, están contenidos todos los principios y energías de las bases de la vida, tanto a nivel material como mental y espiritual.
Los arcanos menores contienen la parte y energías que conforman y afectan el mundo material y físico, las de los cuatro elementos: Bastos al fuego, copas al agua, espadas al aire y oros a la tierra, con lo que nos representan el cómo usamos nuestras capacidades de intuicion o fuego, pensamiento o aire, sentimiento o agua y sensación o tierra. Es decir el cómo nos relaccionamos y nos desarrollamos en nuestra encarnación o vida en la tierra. Los arcanos mayores del Tarot, contienen el quinto elemento que los engloba a todos: el Eter, Akasha o Energía Primaria Universal y representan los diferentes ciclos vitales por los que pasa el ser humano en su desarrollo y transformación, es decir, las ideas arquetípicas puras. De este modo, dichos arcanos mayores, son capaces de proyectar energías de vibraciónes específicas, con lo que podremos emplearlos para alentar y energizar positivamente nuestra mente y cuerpo, así como los proyectos que deseemos conseguir.
Encontrará a lo largo de estas páginas en el apartado de descripción de cada uno de los arcanos, una versión propia de las láminas. También puede usarla si le gusta o siente que está en consonancia con usted.
La mejor baraja de Tarot, es la que a uno le llama más la atención, porque vibrará al unísono con ella y eso la hará para usted la más poderosa.
EL SECRETO OCULTO EN EL TAROT
La mayoría de las personas conoce el Tarot a través de la videncia o utilización cómo herramienta de adivinación, pero en realidad esto solo es la punta del iceberg.
Existen varias formas de trabajo con las vibraciones de Los Arcanos, las cuales resumo a continuación:
Meditación
Se trata de meditar observando la carta que hallamos elegido en particular, dejándonos fluir con los símbolos allí representados con el fin de sentirnos uno con ellos. El fin de este método, es conseguir la serenidad y eliminar estrés y ansiedad al usar las energías que nos transmiten los naipes, así como aprovecharlas en nuestro beneficio.
Visualización y proyección
En esta técnica nos visualizamos dentro de la carta en sí, proyectándonos a su interior. Es una técnica compleja, pero con ella podemos conseguir las energías y fuerzas de la carta de que se trate, es un camino de cambio interior.
Contemplación
Mediante la contemplación pasiva, podemos adquirir cierta cualidad de la carta que nos interese. Simplemente observando y dejando que nuestro subconsciente se impregne de la energía de que se trate. Una variedad de esta técnica, la contemplación activa es la que se basa la adivinación, ya que literalmente la carta nos transmite información sobre el pasado, presente y futuro.
Identificación
Es una variación de la técnica de meditación, pero en ella nos proyectamos al interior de la carta obteniendo las cualidades que deseamos de ella. Podemos a continuación actuar en el interior del arcano mediante técnicas de visualización.
Programación
A través de la programación, se puede actuar directamente en el mundo físico, enviando la energía que canalizan los arcanos y de esta forma modificando las circunstancias. Es una técnica que nunca debe intentar usarse para hacer el mal.
Atracción
Esta será la que mas desarrollaremos. Por medio de la simbología y energía de cada uno de los arcanos mayores, seremos capaces de atraer a nuestro mundo material y a nuestra vida energía primordial a aquellas cosas que deseemos. Usaremos las diferentes cartas como si fueran un conjunto de amuletos que emplearemos para las diferentes facetas en que nos sean de utilidad. Podremos aplicarlos tanto en el ámbito de mejora de la salud o condición física (nunca sustituyendo las terapias convencionales o medicamentos, solo de apoyo), para las relaciones personales o para atraer la prosperidad material.
Activando los centros energéticos
Una de las maneras más eficaces de beneficiar nuestra salud ayudándonos del Tarot, es usarlo para armonizar y activar todo nuestro sistema energético, particularmente los centros de transformación o intercambio de energía llamados chakras, y remover o eliminar energías estancadas en nuestro interior que no nos benefician y pueden generar enfermedades a nivel energético y de ahí reflejarse en el cuerpo físico. Para ello comenzaremos realizando una meditación profunda observando la carta del loco, el comienzo, la energía bruta, el impulso. Intentemos visualizar una bola de energía que llega desde la punta de la coronilla y va bajando hacia el suelo, rellenado nuestro sistema energético y arrastrando todas las cargas negativas que se diluyen en la tierra donde serán recicladas.
También y dado que cada carta del Tarot está asociada o “rige” ciertos órganos o partes del cuerpo, es posible transmitir la Energía Universal Primaria a través de ellas a ellos y de esa manera beneficiarlos y potenciar su salud y bienestar e incluso ayudar a su sanación.
En la siguiente parte del libro, les explicaré cuales son las cartas que se identifican con las diferentes zonas del cuerpo y de esa manera, a través de cuales de ellas se puede transmitir energía para facilitar su salud.
En cuanto al uso como arte adivinatoria, no me extenderé mucho sobre el tema ya que no es el propósito de este artículo. Hay varias formas y puntos de vista desde los que se puede abordar la predicción. Personalmente me enfoco más hacia el Tarot Cuántico Evolutivo, en el que lo que pretendemos es ayudar en determinados momentos del ciclo vital. Podemos también hacer uso del tarot para “vislumbrar” detalles de la salud a nivel energético, que no se ven a simple vista y así ayudarnos en nuestra sanación física, mental y espiritual. Existen varias tiradas específicas para ello, pero conviene recordar, una vez más, que las Terapias Energéticas nunca son sustitutivas de la visita a un médico o de los tratamientos necesarios, debemos emplearlas solo como un complemento a ello. Si estamos enfermos, lo ideal es recurrir a todos los medios que tenemos a nuestra disposición para sanarnos y recuperar la salud, ya que todo suma, pero sin dejar de lado las terapias convencionales. La Naturopatía en general y las terapias Holísticas, son un excelente complemento que sin duda contribuye a la mejora, pero nunca recomiendo en mis libros ni cursos que se usen como sustitutivo, lo ideal es tratarnos desde todos los enfoques: tratar el cuerpo físico, tratar el cuerpo energético y el cuerpo espiritual.
Del libro: «Tarot Cuântico Evolutivo», Autor: Arânzazu Prieto G,
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